¡Hoy vengo con muchas ganas de hablar, así que al lío!
Lo primero, ya he pasado de las diez mil visitas totales al blog, ¡muchas gracias a todos! Jamás pensé que pudiera llegar a tener tanto éxito.
Aquí tenéis la que posiblemente será mi última foto posando con mi antigua cámara, la Nikon D3000, Violeta. Está sacada con la nueva, una Nikon D90 a la que he decidido llamar Vladimir. Puede que suene un poco infantil nombrar a objetos pero es algo que me gusta hacer. Me da un poco de pena dejar de usar la cámara con la que he aprendido, pero era necesario.
Aquí va una pequeña comparativa entre ambas.
Por una parte, se nota que la D3000 es una cámara para principiantes, perfecta para aprender. La interfaz es mucho más sencilla e intuitiva, además de contar con un modo guía. La D90 puede llegar a ser un poco complicada de manejar porque todos los ajustes se deben hacer mediante botones, a diferencia del menú de la D3000, aunque esto también la hace mucho más cómoda a la hora de cambiar el ISO o la apertura del diafragma (que cuenta con una rueda específica).
En cuanto a calidad de imagen, ni punto de comparación. Los 10.2 mpx de resolución de la D3000 no tienen nada que hacer contra los 12.3 mpx de la D90, podéis observarlo bien en la imagen. El ISO de la D90 llega hasta el 6400 mientras que la D3000 sólo al 1600. Además, la D90 cuenta con vídeo de 1280 x 720 píxeles y una textura cinematográfica muy atractiva, aún no siendo el vídeo su punto fuerte.
En contra tenemos que es más grande y pesada, y algunos factores que la hacen un poco incómoda, como que no se pueda acceder a la galería de fotos mientras que se utiliza la pantalla como visor.
Aún así, estoy muy satisfecho con mi compra y tengo muchas ganas de ponerme en serio a trabajar.
¡Hasta mañana!
Gracias a violeta por los buenos momentos que nos ha hecho pasar.....
ResponderEliminarMe voy a poner emotivo... jajajaja
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